Prosalus es una ONGD que trabaja desde 1985 por la promoción de la salud en Bolivia, Perú y Mozambique. Partimos de la convicción de que cualquier persona, por el hecho de serlo e independientemente de su raza, credo, sexo, nacionalidad, lugar de residencia, estado civil o cualquier otra circunstancia, tiene un conjunto de derechos que son universales, inviolables e inalienables, entre los que se encuentran el derecho humano a la salud, a la alimentación y al agua.



25 sept 2010

De Sucre a Presto conociendo los ayllus

Inmacualda Martín

Estamos en Sucre (Bolivia), Patrimonio de la Humanidad. El primer día en esta ciudad, tuvimos reuniones con dos organizaciones bolivianas con las que trabaja Prosalus: PASOS e IPTK. Con Pasos hicimos un viaje a Presto, segundo municipio más pobre de Chuquisaca, donde nos reunimos de nuevo con las autoridades municipales, el director del centro de salud, el responsable de la UNI y el director de la Dirección Distrital de Educación, reuniones muy interesantes, con una propuesta de trabajo coordinado para el desarrollo de las comunidades.

Visitamos a continuación Huaylla Pampa Alta y Baja donde nos esperaban miembros del Ayllu (forma de organización indígena), el curaca (anciano o sabio del ayllu) y dos lideresas, junto a las personas que conforman la comunidad. Expusieron el trabajo que están realizando y nos contaron con alegría sus progresos. Están emocionados con los huertos, lo que les permite diversificar su dieta alimentaria. Me ha sorprendido el entusiasmo con que se expresaban las dos dirigentes del ayllu, mujeres jóvenes, que hace algunos meses no se atrevían a hablar. Ellas han estado capacitándose en horticultura y adquirido conocimientos sobre nutrición y están muy animadas a continuar con fuerza, ya que perciben cómo han mejorado sus hábitos alimentarios, siendo ahora más sanos; también participan activamente con el personal sanitario en la toma de datos antropométricos de las niñas y niños desnutridos de la comunidad y ruegan que se continúe el trabajo para conseguir mejores condiciones de vida.

Pero lo que más me ha sorprendido ha sido cómo interpelaron al concejal del Municipio de Presto, presente en la reunión, pidiendo que se las tenga en cuenta en la toma de decisiones del municipio, sobretodo para la elaboración de la programación operativa anual (POA) y se quejaban de que por el hecho de estar constituidos como Ayllu, las autoridades municipales no atendían los derechos de la comunidad.

Cuando finalizó la reunión, nos invitaron a comer en la casa de un campesino, que se había ataviado con sus prendas tradicionales para recibirnos. Son especialmente acogedores y te agasajan con lo mejor que pueden ofrecerte: papas, mote y unos huevos cocidos.

Mañana de nuevo nos esperan reuniones en la ciudad con los miembros del equipo del Instituto Politécnico Tomás Katari, y a continuación, visitaremos otras comunidades: igual de lejanas, igual de pobres, igual de acogedoras e igual de esperanzadas en alcanzar unas condiciones de vida dignas.

2 comentarios:

  1. Impresionante crónica.
    Transmite las impresiones del viaje con mucha sensibilidad. Me alegra especialmente que las comunidades indígenas conozcan y sepan hacer valer sus derechos.

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  2. Veo que se van consiguiendo avances, y que las mujeres ya se atreven a hablar en publico, pero observo con desilusión que en la foto que ilustra el reportaje, siguen estando casi ocultas en segunda fila de la reunión.

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